lunes, 22 de abril de 2013

Mentiras

Después de hablar un rato Blas y yo, sonó el timbre, me levanté y me dirigí a la puerta, abrí y era... era Álvaro
¿Qué hacia aquí? ¿Pasaba algo?
-Te echaba de menos- Dijo abrazándome
Álvaro me empezó a besar fuerte y profundo, empezó a cogerme en brazos sin parar de besarme. Entremos cerrando él la puerta, intenté separarme de él, pero no me dejaba, es como si quisiera besarme todo el rato a cada minuto de cada hora. Empezó a bajar por mi cuello, de ahí decidí que parara.
-Álvaro, para no sabes lo que estas haciendo- Solté intentando separarme
-Me da igual... te tengo ganas y lo necesito- Soltó agitado en mi cuello
-Está Blas en el sofá- Dije cortando el rollo
Álvaro paró y miró hacia el sofá y ahí estaba, me bajó de él sonrojado
-¿Qué tal?- Dijo Blas arqueando las cejas
-Em... bien, aquí... -Soltó todo tímido
-Guay- Dijo Blas apunto de reírse
-Bueno, siento cortar esta bonita conversación, pero me gustaría saber que pasa- Digo mientras me acerco al sofá
-Que Blas esta apunto de descojonarse de mí- Dijo Álvaro acercándose hacia mí
-No te lo niego, bueno mejor me voy que estaréis mas cómodos solos.
Blas se levantó dirigiéndose a la puerta
-Nos vemos mañana en clase
Blas asintió y se marchó por la puerta. Álvaro me volvió a coger besándome  Joder, si que me quería.
-Álvaro, antes de que vayas ha hacer el mismo numerito de antes, tengo que hablar contigo- Solté mirándole a los ojos
-¿Pasa algo pequeña?
-No, nada solo que no estoy preparada para esto
-Ahh... lo siento, tenia que haberte preguntado antes- Dijo disculpándose
-No pasa nada precioso.
-Puedo esperar- Dijo abrazándome
Le sonreí y me baje de sus brazos. Nos sentemos y nos pusimos una peli, al rato Álvaro se queda dormido. Que mono. Mañana será un nuevo día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario